¿Cómo mejorar la propia realidad laboral? ¿Podemos cambiar nuestro propio entorno profesional y las sensaciones que nos genera, sin tener que cambiar de empresa? La respuesta es rotunda y clara: Sí, es posible. La teoría y técnicas del Job Crafting nos ayuda a hacerlo. Se trata de un enfoque que nos ayuda a cambiar y mejorar, de forma proactiva, todo lo que constituye nuestro ámbito de trabajo.
En Steps for Talent tenemos claro que se trata de un enfoque que ayuda en gran medida tanto a las Personas a título individual (mejorando la percepción que éstas tienen de su trabajo, su motivación y su desarrollo), como a las Organizaciones (aumentando el bienestar de sus colaboradores, mejorando sus índices de experiencia del empleado y aumentando la productividad y los resultados).
Por ello, en este post nos hemos propuesto dar difusión a este enfoque de diseño de puestos de trabajo, cuyo objetivo es lograr un equilibrio entre las necesidades y motivaciones de los trabajadores, y las estrategias y líneas de actuación que deba seguir cualquier empresa.
¿QUÉ ES Y CÓMO PODEMOS APLICAR EL JOB CRAFTING?.
La traducción literal de Job Crafting es “elaboración de puestos de trabajo”. Esta teoría examina cómo los empleados, de manera proactiva, dan forma a su trabajo para que éste sea más significativo para ellos. Las primeras autoras en acuñar el término fueron Amy Wrzesniewski y jane E. Dutton, en 2001, tras un estudio anterior que habían hecho en 1997. En éste hicieron seguimiento a 28 limpiadores de hospitales. Vieron que, para algunos, su trabajo era sólo el desempeño de una determinada tarea de limpieza, cobrar el salario por ello… y se acabó. Otros, en cambio, vieron su trabajo como algo con un propósito, entendiendo que la limpieza que realizaban era una parte muy importante del cuidado de los pacientes y que ayudaba también mucho al personal de enfermería y médicos en su trabajo. Algunos limpiadores, incluso, hacían tareas o esfuerzos adicionales, prestando especial atención a pacientes especialmente preocupados o aislados. Dotaban a su trabajo de un sentido y realizaban pequeñas tareas nuevas, no contempladas en la descripción de su puesto, que ayudaron a mejorarlo. Esto casual y causalmente aumentaba su motivación y su desempeño.
PERO, EN CONCRETO, ¿CÓMO PODEMOS MEJORAR NUESTRA REALIDAD LABORAL?
El enfoque de Job Crafting establece que hay cinco formas de mejorar nuestro trabajo:
1. Task Crafting: alterar, cambiar o adaptar la naturaleza de las tareas asignadas, respetando la línea base establecida en tu puesto, pero introduciendo las cosas que a cada uno le guste más hacer y/o aquellas para las que tenga más fortalezas en su perfil. Por ejemplo, un comercial al que le guste la tecnología puede ofrecerse para aportar su conocimiento en el desarrollo de un canal de ventas online; un cajero de un supermercado con habilidades sociales y empatía, puede recoger sugerencias de la gente y hacer de punto de recepción de ideas sobre mejora de experiencia de clientes… Todo ello ayuda a mejorar la motivación y el desarrollo de los trabajadores, así como a desarrollar a la Organización y aumentar sus resultados.
2. Relational Crafting: cambiar o adaptar las relaciones en el trabajo, con iguales, superiores, colaboradores, clientes…Por ejemplo, puedes tratar de conocer mejor a otras personas con las que el trabajo no es todo lo fluido que debería, hablar de forma constructiva con alguien con quien puede haber conflictos, entender sus posibles motivos de fondo… Todo ello hará que aumente tu inteligencia emocional, que las relaciones mejoren y que la motivación y la productividad también.
3. Cognitive Crafting: cambiar la forma en cómo percibes tu trabajo. Todo trabajo es importante y todo puesto tiene un sentido y propósito, de cualquier ámbito y nivel. Cómo reflexione cada uno sobre ello y cómo perciba ese propósito, es un punto clave para su motivación y la relación que establece con su realidad laboral, pero también para seguir avanzando y desarrollándose.
4. Developmental Crafting: aquí se trata de buscar tu propio desarrollo a través de tu puesto. Como ejemplo, cualquier persona que se ofrezca voluntaria para acometer lo que no sea el eterno “A, B Y C” de su trabajo. Siempre aparecen situaciones nuevas que requieren de un nuevo desafío, por pequeño que sea, fuera de la zona de confort. Todo aquel que entienda que ir adquiriendo habilidades en el desempeño de su puesto le aportará desarrollo a futuro, está mejorando la relación con su trabajo e invirtiendo en sí mismo.
5. Environmental Crafting: cambiar aspectos del lugar de trabajo para hacerlo más agradable y acorde a tus necesidades. Aquí entramos en temas que van desde el diseño de lugar de trabajo a ergonomía, condiciones físicas para favorecer la concentración (meterte en una sala tranquila para pensar y crear si rindes más así, ponerte en una sala común con compañeros si eres muy extrovertido y necesitas compartir continuamente, etc.).
Está claro que las Organizaciones y, especialmente los managers en su rol de líder, deben crear un punto de entendimiento mutuo compartido con los empleados, para que se fomente el “Job Crafting”, alineado siempre con la estrategia general de la Compañía. Eso mejora la realidad individual laboral de todos los empleados y facilita los tan buscados “compromiso y fidelización de los mismos”. Además, dota de flexibilidad y de un mejor aprovechamiento de los recursos existentes a la Compañía.
Llegados a este punto algunos diréis: “eso en mi empresa es imposible”. Permitidme, entonces, regresar al inicio del post en donde establecía la definición exacta de Job Crafting, centrándonos en el término “proactivamente”. Es decir, se trata de adaptar y mejorar tu puesto atendiendo a tus propias necesidades, reflexionar y mejorar tu autopercepción, entender cómo tus fortalezas pueden servir para mejorar tu puesto, desarrollarte y capacitarte a través de un óptimo desempeño en el mismo. En definitiva, no se trata de que llegue tu empresa, con un cuestionario en el que te pregunte qué quieres, a la carta, ese no es el sentido. Se trata de buscar, por iniciativa propia, las parcelas en las que puedes encontrar y desarrollar aspectos positivos en relación a tu propio perfil e intereses.
En Steps for Talent trabajamos el Job Crafting, tanto con Organizaciones a la hora de fomentar su implantación, como en sesiones particulares con Personas que quieren mejorar su relación con su realidad laboral y aprender a gestionarla de una forma más constructiva, orientada a su propio bienestar y desarrollo profesional. Porque, tal y como dijo Thomas A. Edison: “Hay una manera de hacerlo mejor, búscala”. En eso consiste el Job Crafting y es algo que forma parte de nuestra misión y propósito como empresa: contribuir a mejorar el entorno laboral. ¿Hablamos?.
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